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Cuándo pensais en vuestro comercio, ¿de qué estáis mas orgullosos?

Lo primero, la satisfacción de haber conseguido levantar un negocio muy especializado en la venta complementos, ropa y baño para niños en solo 13 metros cuadrados y haber conseguido que sea rentable durante 16 años. En segundo lugar, haberlo hecho sola, sin la ayuda de otras personas, realizando todas las tareas de la cadena: la compra, el etiquetado y la venta física y online. Finalmente, estoy orgullosa por dar un servicio, en especial, a la gente del barrio de unos productos de calidad y observar la satisfacción de los clientes ya que nunca he tenido reclamaciones o quejas.

¿Cuál es la historia de tu comercio?

Como madre desarrollé un interés especial por la ropa de niños y accesorios de moda infantil. Tuve la oportunidad de visitar muchas tiendas en todo el mundo, descubrir marcas maravillosas e incluso aprender a diseñar la ropa de mis hijas. Después de varios años dandole vueltas, decidí abrir una pequeña tienda en Madrid en la que los padres pudieran encontrar ropa para niños de calidad de proveedores españoles. Patucos cumple este año 15 años de vida.

¿Cuál es tu experiencia profesional?

La única experiencia que tenía antes era el trabajo cara el el púbico ya que soy farmaceútica y toda la vida he trabajado frente al cliente. Nunca antes había emprendido un negocio, pero este era mi sueño y se ha visto cumplido con éxito. Me hice autónomo porque quería tener mi propio negocio y cumplir ese objetivo del que hablaba antes aún a riesgo de asumir más riesgo. Quería más independencia y libertad pese a que sabía que trabajaría mucho más, pero para mi propia empresa.

¿Cómo ha afectado el covid 19 a tu negocio?

El Covid 19 ha afectado mucho a mi negocio. Había recibido todos los pedidos de baño y verano cuando explotó la pandemia y tengo que pagar por un género que no sé si lograré vender. Las cantidades son importantes. Por primera vez en estos 16 años he tenido que pedir un crédito ICO para solventar esta situación y poder pagar a mis proveedores lo que me obligará a estar endeudada cosa que antes nunca había sucedido. A esto hay que añadir la incertidumbre de lo que sucederá luego. Si el negocio será o no sostenible.